Viene de: "El Secuestro del Santa María. Una acción olvidada de la Oposición al Franquismo. 1ª, 2ª y 3ª
“Un avión de patrulla de Estados Unidos encontró en medio del Atlántico el barco portugués Santa María en poder de unos rebeldes, les dijeron que se dirigían a la colonia portuguesa de África occidental de Angola. Su captor, el capitán Henrique Galvao, negó la petición de cambiar el rumbo y dirigirse a Puerto Rico. Ahora, si el tiempo lo permite, el buque se mantendrá a la vista de los aviones patrulla estadounidenses hasta que sea interceptado o toque algún puerto” (1:01) “Tras el avistamiento se produjo una reunión entre el Departamento de Estado y el Pentágono para dictaminar si la toma del barco podía considerarse un acto de piratería. Las autoridades consideran que dictaminar que se había cometido piratería solo puede hacerse una vez interceptado este y abierta una investigación”. (1.203). 26 enero de 1961 Cronología diaria del NYT de la Biblioteca y Museo presidencial de John F. Kennedy
El piloto estadounidense
les transmite por radio que el almirante Robert Dennison, comandante en jefe de
la Flota del Atlántico de Estados Unidos, les ordena dirigirse al puerto de San
Juan de Puerto Rico, Galvão le responde que no aceptan órdenes de autoridades
extranjeras y que si les intentan atacar no se entregarían; preferían hundir el
barco antes, sin embargo estarían dispuestos a “conferenciar a bordo de la
Santa María con autoridades norteamericanas”, negándose a hacerlo con
autoridades portuguesas y españolas.
Reflexionan sobre lo que puede
pasar a partir de ese momento, ellos navegan a 20 nudos en dirección a África y
a esa velocidad no creen que se pueda hacer un abordaje, la posibilidad de una
colisión provocada hundiría los dos barcos. También piensan en la posibilidad
de que bombardeen el buque para dejarlo sin gobierno e intentar un abordaje en
el que 24 hombres mal armados poco tendrían que hacer, pero en el que se podría
producir una carnicería también en el pasaje. Quedan a la espera del desarrollo
de los acontecimientos vigilados permanentemente por un avión de las Fuerzas
Aéreas de los Estados Unidos que periódicamente es reemplazado.
Henrique Gãlvao |
A partir de la
localización del buque se avivan antiguos problemas entre los portugueses y los
españoles del comando y se manifiestan las diferencias de criterio entre los tres comandantes con el agravamiento de que, según Sotomayor, Velo y Galvão ni se
dirigían la palabra desde antes del secuestro por diversos desencuentros en la
planificación de la acción, la enemistad entre los dos llega a tal punto que, a
pesar de que Velo aparece junto a Gãlvao en la rueda de prensa que dan después
del secuestro y de que en la entrevista a los tres miembros del Estado Mayor
del DRIL a “Blanco y Negro” aparece como el “Director General de la banda”, Henrique Gãlvao en su libro “Santa María, My
Crusade for Portugal” (publicado en 1961 por The World Publishing Company de Ohio
1961) solo hace referencia a él en la página 179 cuando relata la subida al
barco de los miembros del comando. Según el libro de Gãlvao él era el
Comandante en Jefe y Sotomayor su mano derecha, sobre todo en cuanto a navegación;
cuestión que es totalmente desmentida por el gallego en “24 Hombres y nada más”
y en “Yo robé el Santa María”.