El Colegio Mayor San
Ildefonso, fundado por el Cardenal Cisneros en 1499, fue el embrión de la
Universidad de Alcalá de Henares, es una de las joyas artísticas de la
Comunidad de Madrid, obra perteneciente al renacimiento español y declarado por
la UNESCO Patrimonio de la Humanidad en 1998 junto con el casco histórico de la
Ciudad. En él se sitúa hoy el Rectorado de la Universidad Alcalaína, dentro de
este magnífico edificio se encuentra el Patio Trilingüe por donde se da acceso
a las aulas de Latín, Griego y Hebreo y al Paraninfo que hoy en día funciona
como Aula Magna y en donde todos los años se entrega el Premio de Literatura en
Lengua Castellana “Miguel de Cervantes”, esta es una sala con artesonado
mudéjar y decoración renacentista, su galería superior es de estilo plateresco.
En esta Universidad estudiaron o dieron clases Tirso de Molina, Quevedo, San
Juan de la Cruz, Lope de Vega, Jovellanos, Calderón, Nebrija, etc.
Para doctorarse el
alumno tenía que pasar un examen oral en latín y griego en el Paraninfo, se
subía a la cátedra o púlpito y tenía que responder a cada una de las preguntas
de los profesores que presidían el tribunal, el aspirante a doctor tenía a su
lado a dos alumnos, uno que le ayudaba y el otro que le dificultaba el examen, era
todo un espectáculo, en la Galería se colocaban los estudiantes que tomaban
partido a favor del examinado animándole o en contra criticándole y riéndose de
él, a veces las discusiones entre ellos acababan en la calle a palos.
En el momento que el
examinado fallaba una sola de las preguntas suspendía el examen. El alumno
aprobado salía a hombros por la llamada Puerta de la Gloria y se iniciaba una
fiesta pagada por él que en algunos casos llegaba a durar varios días. El
suspendido tenía que salir por la Puerta del Burro, una vez fuera era manteado,
se le escupía encima y era paseado por la ciudad en donde la población le
arrojaba los desperdicios que tenían en casa. Cuentan que Ignacio de Loyola
suspendió el examen y se doctoró posteriormente en Paris, posiblemente por no
pasar por la humillación de salir del Paraninfo por la Puerta del Burro de
nuevo.
Un examen similar
tendrían que pasar anualmente todos aquellos políticos que gestionan lo público
en este País. El Tema sería único y algunas de las preguntas podrían ser estas:
¿Está cumpliendo
usted sus promesas electorales?
¿Cree que su labor ha
acrecentado el bienestar de los ciudadanos?
¿Ha aplicado a
rajatabla y punto por punto la Constitución Española en el desarrollo de su
labor ejecutiva o legislativa?
¿Ha sido imparcial en
la toma de decisiones y no ha favorecido a ninguna persona, empresa, grupo
empresarial o agrupación de intereses por amistad, cercanía a su partido o
beneficio propio?
¿Ha defendido usted
la democracia y los derechos de sus ciudadanos hasta más allá del juramento
realizado en su toma de posesión?
¿Ha puesto siempre
por delante el interés de los gobernados dejando atrás el interés propio o de
su partido?
Una representación de
ciudadanos de toda índole y condición asistiría a este examen y podría
certificar o rechazar las afirmaciones vertidas por el político examinado,
animando o criticando como lo hacían en aquella época. La comprobación de que
el examinado mentía en una sola de las preguntas sería causa de destitución
fulminante.
¿Se imaginan a Fátima
Báñez intentando pasar el examen?, y que me dicen de Alberto Ruiz Gallardón o
José Ignacio Wert, solo por mencionar a los Ministros más nombrados estos días.
Pero lo que sería una juerga entre el público sería observar la sonrisa burlona
de Cristóbal Montoro intentando justificarse o de Luis de Guindos. Tampoco
tendría desperdicio ver a Alfredo Pérez Rubalcaba o a Soraya Rodríguez. Estás
sesiones se podrían televisar en directo, la bajada de audiencia de Sálvame y
el Gato al Agua, solo por mencionar dos programas similares, sería significativa.
Y Artur Más, Duran i Lleida, Feijóo, Pepe Griñan etc. El espectáculo sería
total, el único problema sería la instalación de una máquina de la verdad para
el examen.
—La respuesta es…… ¡MENTIRA!
Me temo que la Puerta
de la Gloria acabaría llena de telarañas. Manteados y vejados dejarían los
parlamentos, sedes de gobierno o ministeriales por la puerta trasera, la de los
burros, la misma que usa Mariano Rajoy para escapar de las preguntas
impertinentes de la Prensa.
Tal es el panorama al
que asistimos en la política de este País. El espectáculo del Partido Popular es
esperpéntico, lleno de corruptos o presuntos corruptos, aupado al poder por la
dejación ideológica de los “pesoistas” con su propia cuota de corruptos y
presuntos corruptos, imponiendo las teorías más conservadoras vistas en este
País desde la muerte del dictador y aceptando las imposiciones, como antes hizo
el PSOE, de poderes ajenos al Estado, que ni los ciudadanos hemos elegido.
El Estado se
desmorona y con él la democracia, todo lo que prometieron solucionar lo han
empeorado, se avecinan más de 6 millones de parados, crece día a día el
porcentaje de ciudadanos en exclusión social mientras un gran número de ellos
están en riesgo de estarlo, una deriva soberanista en Euskadi y Cataluña, el desmantelamiento
de la Sanidad Pública, entregada a oscuros intereses económicos, la toma por la
Iglesia del Ministerio de Justicia y Educación, imponiendo sus doctrinas a una
población cada vez menos creyente y practicante y en un País cuya Constitución lo
define como “aconfesional”, una política económica y laboral persistente que
acarrea fracaso tras fracaso y la corrupción y los corruptos apareciendo debajo
de las piedras, algunos sentados en altas estancias de poder o de instituciones
públicas.
El Partido que
sustenta al Gobierno es culpable, uno por uno sus diputados y senadores no se
pueden librar de la culpa, como no se podrán librar de ser culpables aquellos
que votaron y alentaron con aplausos y vivas la entrada de España en la II
Guerra del Golfo, nadie puede arroparse en un grupo parlamentario como nadie
puede zafarse de su responsabilidad en un Consejo de Administración. Pero
también son culpables los diputados de la oposición por no dar suficiente
visibilidad a este desastre al que nos vemos arrastrados todos los ciudadanos. ¿Qué
hacen acudiendo a esos parlamentos si nunca lograrán nada, que hace el
principal partido de la oposición negociando algunos temas con el Gobierno?,
piensan que les van a sacar por la Puerta de la Gloria, ¡error!, plántense,
tengan un poco de dignidad democrática, o los ciudadanos los echaran a patadas
por la Puerta del Burro como a ellos, no hay expresión más cobarde en estos
días que la llamada “responsabilidad institucional”.
República Monárquica
y Libertaria de Usera, 12 de diciembre de 2012. I AÑO MARIANO
Wow has vuelto con fuerza¡ Enorme el post¡ Cobardía y desvergüenza son la calidad de las cualidades de toda esta banda .. y nosotrAs, que exceso de paciencia y aguante .. Pero hemos despertadO (a hostia limpia) creo, deseo, ya no puede valernos ninguna opción que no pase por el compromiso y el cumplimiento del bien común, una opción participativa desde las bases y abierta a la cooperación con movimientos sociales. De ésta salimos #JuntAs Sí o Sí¡ Un abrazo:)
ResponderEliminarDespués de terminar y publicar la entrada leo que el PSOE veta junto con UPyD a Amaiur para ir al Constitucional contra el asunto de las Pensiones, más tarde me entero que ERC no pedirá la dimisión de Puig por no ser que acuerdos con CIU, creo que me quedé corto. La realidad deja obselotas las entradas. Gracias por leer.
ResponderEliminarMENUDA ENTRADA , ESTO HAY QUE ESCRIBIRLO EN MAYUSCULAS HAY TANTO POCON COMPROMISO POR NO DECIR NINGUNO POR LA CLASE POLITICA ,TENDRIA QUE SER OBLIGARIO EL PROGRAMA ELECTORAL, PANDA DE NECIOS, GRACIAS JUAN ESTO ES UN ENTRADON ,EN LA ANTERIOR JURISTA Y EN ESTA TE SALES GRACIAS
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