La explosión y
hundimiento del Maine el 15 de febrero de 1898, un acorazado de la Armada de
EEUU enviado a la Habana para supuéstamente proteger los intereses de los
ciudadanos estadounidenses en medio de la revueltas refriegas entre las fuerzas españolas y los independentistas cubanos, es considerado por
muchos historiadores como una operación de falsa bandera, incluso la comisión
formada para esclarecer los hechos no llegó a conclusión alguna. Alentada la
opinión pública estadounidense por el “Journal” de William Randolph Hearts y el
"World" de Joseph Pulitzer, el Gobierno U.S.A. intervino
definitivamente en la guerra de la Independencia de Cuba firmándose el 10 de
diciembre de 1898 el Tratado de París por el que E.E.U.U. se hacía con el
control de Cuba pasando a ser la nueva potencia colonial de tal forma que pocos
días después, el 1 de enero de 1899, los americanos iniciaron la invasión de la
Isla.
La Red Gladio fue una
organización orquestada por la OTAN y financiada por la CIA y el MI6 que no dudó
en infiltrarse en los Servicios de Seguridad de diversos países europeos al
comienzo de la Guerra Fría, con la aquiescencia o la pasividad de los estados
involucrados, para evitar que el
comunismo llegara al poder en la Europa Occidental y denunciada en 1990 por el
Parlamento Europeo. A la Red Gladio y a la Operación Gladio (término usado en
Italia para ese tipo de actividades durante la llamada “estrategia de la
tensión”) se le considera responsable, en algunos casos demostrados en sede judicial, de atentados como el de la Banca Nazionale
dell'Agricoltura de Piazza Fontana en Milán el 12 de diciembre de 1969, en la
que murieron 16 personas, las masacres de Peteano en 1972, el Golpe de Estado
de Grecia de 1967, la masacre de la plaza de Taksim en Estambul en 1977 o el mismo
golpe de Estado en Turquía de 1980.
Incluso el Juez
Felice Cassone descubrió la existencia de la Operación Gladio leyendo las
cartas del líder de la Democracia Cristiana italiana, Aldo Moro, escritas durante su secuestro. El secuestro y muerte de Aldo Moro efectuado por las Brigadas
Rojas en 1978 se considera una de las operaciones encubiertas dentro de la
Operación Gladio para evitar el llamado Compromiso Histórico que podría haber
llevado al PCI de Enrico Berlinguer y al PSI a colaborar orgánicamente con la
DC en el gobierno de Italia. En España se le considera también partícipe en los
asesinatos de Montejurra en 1976 y en la colaboración con los grupos de
ultraderecha española y en los numerosos atentados de esta durante la llamada
Transición. (Véase Asesinatos de Atocha)
La estrategia de los
Servicios de Seguridad de EEUU, GB, el Mossad y otros llevan trabajando durante
años en la estrategia de la desinformación, engaño, distracción, ocultamiento,
manipulación de los medios y de la opinión pública del mundo Occidental. Después
de la Invasión Soviética de Afganistan EEUU intervino ayudando a los grupos
rebeldes, entre los que estaban los Talibanes, con armas y apoyo logístico y de
inteligencia. Como menciono en un posteo del 15 de septiembre de 2011 titulado “Reflexionesy preguntas sobre Bin Laden el 11S y la libertad” de mi anterior blog:
“….Bin Laden reclutado por la CIA en Arabia Saudí instruido y financiado por ella pasó a gestionar las operaciones de apoyo a los Talibanes.
Una vez expulsados los soviéticos, volvió a su País, Arabia Saudí, donde crea una red terrorista llamada Al Qaeda. Por esas actividades fue expulsado de su País y de Sudán, refugiándose al final en Afganistán, convertido ya en una tiranía religiosa por los Talibanes que gobernaban con la Sharía en la mano. Porque, aquellos que los medios y la Administración Reagan llamaban “The Afganistán Resistence” que luchaban contra los “enemigos de la libertad”, ahora se habían convertidos en el enemigo”.
Reagan en 1985
declaró a los Talibanes y por supuesto a Bin Laden como “paladines de la
libertad en defensa propia” claro que en ese momento el enemigo era la Unión
Soviética.
Sadam Hussein antiguo protegido y financiado de la CIA y el
Departamento de Estado de EEUU durante la guerra Irano-Iraquí, se buscó el solo
la intervención con la invasión de Kuwait, dando lugar a la I Guerra del Golfo.
En la llamada Tormenta del Desierto murieron entre 10.000 y 35.000 civiles,
aquí también actuó la desinformación. Las posteriores sanciones y embargos a
Irak produjeron también miles de muertos, algunos observadores internacionales
hablan de hasta un millón debido a las hambrunas y la falta de medicamentos,
siempre pegando patadas al enemigo en el culo de los más débiles.
De la segunda guerra
del Golfo, de sus mentiras, engaños, de las armas de destrucción masiva que
poseía el régimen del dictador iraquí, de la vergüenza de ver a un Presidente
Español como perrito faldero del Presidente Bush y del trío de las Azores se ha
escrito ya mucho, pero esa guerra de mentiras
trajo como consecuencia que el mundo fuera menos seguro, lo contrario
que nos vendía el Presidente Bush y sus “llepa culs”, queda más fino en catalán.
Según “Opinion Research Bussiness” en un estudio publicado en 2007 se dice que
la “Operación Libertad Iraquí” produjo 1.033.000 muertes violentas. No pasan
los meses en que no se produzcan atentados con numerosos muertos en el Iraq
“democrático” que tanto nos vendieron los “demócratas” occidentales, el último fue una cadena de atentados en los alrededores de Bagdad, 28 de agosto pasado, que dejaron 75 muertos y más de 150 heridos, pero esto ya no interesa
mucho a los medios occidentales.
El 28 de agosto de
2012 en el posteo “SIRIA Y UNA ANTIGUA ENTRADA SOBRE BIN LADEN Y EL 11S” se me
ocurrió escribir sobre la situación en Siria: “No me extrañaría ver otra vez a
los americanos combatiendo y financiando a grupos de integristas islamistas como
pasó en la Guerra de Afganistán de Ronald Reagan, en el que el principal enlace
entre la CIA y los Talibanes que luchaban por expulsar a los Soviéticos era el
mismo Bin Laden, al que en una extraña operación nos dijeron que habían matado
en Pakistán ese grupo de “rambos” llamados “SEAL”. La Historia de estos últimos
años deja muchas dudas de esas guerras libradas por la libertad y que han
dejado en varios países más integrismo religioso, más muerte y más sufrimiento
que nunca”.
Después de vivir la
cruenta intervención de las fuerzas internacionales en Libia y las muertes y
sufrimientos producidos nos encontramos en una nueva encrucijada, Siria. Aquí
la desinformación es todavía más patente. Ante un régimen del mismo origen
ideológico que el del Iraq de Sadam Hussein, nacionalista árabe, laico y
radical socialista enfrentados posteriormente y que seguían la senda del Panarabismo del que fue Presidente de Egipto, Gamal Abdel Nasser, y que con el
paso del tiempo se ha convertido en una monarquía hereditaria y autoritaria, se
levantaron opositores al régimen que pedían democracia siguiendo lo que se
vino en llamar “Primavera Árabe”. Este levantamiento se convirtió en una guerra
civil de facto en la que dentro de las llamadas “fuerzas rebeldes” empezaron
a aparecer grupos extremistas islamistas, seguramente financiados e infiltrados por
sus máximo enemigo: los Servicios de Seguridad de EEUU. Los americanos son
expertos, como vimos anteriormente, en azuzar el fuego enemigo en su beneficio.
Una guerra civil que
ya ha producido más de 100.000 muertos según la ONU y más de 1.900.000
refugiados según las organizaciones humanitarias que allí operan. La
justificación para la intervención militar de Occidente está ahora en un ataque
con gas sarín que produjo 1.300 muertos entre la población civil. Con todos los
antecedentes ¿Quién fue el autor del ataque? Occidente acusa al Ejército de
Siria, numerosos testimonios al contrario lo achacan a los rebeldes, según
algunas informaciones parece que Arabia Saudí, el gran aliado de EEUU en la
Zona, llegó a proveer de armas químicas a los llamados “rebeldes”. Volvemos a
la desinformación, manipulación y mentiras por ambos lados mientras los
tambores de guerra suenan cada vez más fuertes. ¿Cuántos muertos, heridos,
desplazados y sufrimientos nos esperan? .
Lo peor de todo es
que en el medio hay una población que sufre, pero eso en el mapa de la
geostrategia internacional no importa. Lo que importa es ganar batallas lo más
lejos posible de casa para alcanzar mayor cota de poder, la Guerra Fría no ha
terminado aunque el contrincante del otro lado sea ahora una amalgama de países
que cada vez cuentan más en las relaciones internacionales encabezados por el
heredero del otro Gendarme y a su cabeza
el “demócrata” de toda la vida Vladimir Putin y países como China e Irán y del
lado de los “buenos” el Premio Nobel de la Paz Obama. “No más guerras”, sería la
frase, pero me temo que nunca se llegará a cumplir a no ser que esas guerras,
como amenazan Siria e Irán de forma fantasiosa o no, llegue a las puertas de la
casa de los Gendarmes y sus aliados.
Madrid, 2 de Septiembre de 2013
No voy a hablar más de lo mismo, porque creo que ya se ha hablado, pero sólo tengo que añadir una cosa. Hasta que Estados Unidos no vea una guerra a las puertas de su territorio, no se percatará de lo horrible de la guerra. Espero que hayan aprendido mucho antes de que eso ocurra. Buena entrada. Un saludo, @adriantsn
ResponderEliminargran entrada juan tu cerebro es una hemeroteca de datos, sobre lo horrible que es la guerra les da igual a los EEUU, priman los intereses economicos a las muertes de civiles inocentes , la intervencion sera mas muertes, enhorabuena por tan magnifica entrada
ResponderEliminarInteresantisimo, Juanvi, estas cosas se sospechan, pero no es frecuente leer sobre ellas. Mi sincera enhorabuena por tu posteo de hoy
ResponderEliminarSon capaces de todo con tal de que sus intereses economicos vsyan con el viento a favor. Gracias por el articulo y la gran cantidad de datos aportados.... La memoria lo agradece. @fjavierde
ResponderEliminar