DE MANIFESTACIONES FASCISTAS. ABORTOS TERRORISTAS Y POLÍTICOS DESCEREBRADOS

Video de Jaime Alekos en Youtube

1 de Mayo, Día del Trabajo, la Delegada de Gobierno Cristina Cifuentes (Nanzy Fuentes cuando lee a Borges) autoriza la manifestación en Madrid convocada por el Sindicato de Trabajadores Nacional Sindicalistas de orientación falangista, apenas unos cientos de personas caminan desde Tribunal hasta la Plaza de Chamberí, una manifestación de carácter fascista y nazi que en muchos países de Europa ni se les ocurriría convocar. Acabaron el acto cantando el Cara al Sol brazo en alto al final del cual se escuchó por enésima vez en la España democrática el: “… ¡Arriba escuadras a vencer, que en España empieza a amanecer!  ¡España¡ ¡Una!, ¡España! ¡España! ¡Grande!, ¡España! ¡Libre!, ¡Arriba siempre España!, ¡Arriba!”. Después de esto Carlos Rodríguez, Jefe Nacional del sindicato, hizo una arenga con ese estilo cuartelero y rancio bien conocido por los que vivimos el franquismo o hicimos la felizmente olvidada “mili”.

“Esta Constitución, que salió por los pelos, nos la metieron con calzador o mejor dicho con vaselina para que se enteren bien los del “Día del Orgullo Gay”. “¡Demócratas!,  el suicidio es un acto de desesperación por vuestra culpa no es un acto de dignidad, estáis iniciando a la gente que se asesine cuando en realidad lo que tenemos que decir es que os maten a vosotros”. “Nosotros respetamos al máximo la dignidad de todas las personas, es más las defendemos, de todas las personas, he dicho de todas las personas, pero en momentos de necesidad patria hay que ser español antes que persona”, “la cultura verdadera, la española, tanto en el profesorado como en los alumnos basada en la espiritualidad de la persona, por supuesto con crucifijos en las aulas, y con ímpetu y estilo de milicia, cada español debe ser un soldado en potencia ¡Arriba España!  ¡Arriba Franco!”, a lo que los algunos cientos de participantes respondieron al unísono ¡Franco!, ¡Franco!, ¡Franco!,…

Ante esta incitación a la violencia lo menos que se podía esperar es la intervención de las llamadas Fuerzas y Cuerpos de la Seguridad del Estado, suspendiendo el acto, deteniendo a los organizadores, identificando a los participantes y disolviendo con la dureza que acostumbra con otras concentraciones, claro que estás no son ni fascistas, ni nazis, ni hacen apología de la Dictadura Franquista, ni piden asesinar a los contrarios, ni incitan a la población a armarse y convertirse en soldados contra el sistema.

A pocos metros de allí, en el barrio de Chueca se celebró ese mismo día y a la misma hora una manifestación Antifascista, por supuesto no autorizada y aunque creo que no se pidió autorización obvia decir que si lo hubieran hecho la Señora Delegada del Gobierno no la hubiera autorizado al igual que la Manifestación Atea en Semana Santa, por poner un ejemplo, y pasándose por el forro de esos vestidos pijos que lleva la Constitución Española, pero es que para nuestra rubia preferida los antifascistas, los indignados, los afectados por las preferentes, los desahuciados, los ateos, los comunistas, los socialistas, la izquierda, etc. somos unos nazis y terroristas peligrosos. Las imágenes de Jaime Alekos que encabezan este post no dejan lugar a dudas, mientras unos ciudadanos hacían apología del Fascismo y del Nazismo sin que las autoridades hicieran nada, la policía actuó de forma violenta contra los antifascistas, periodistas y todo los que se lo ponían por delante, pegando de forma indiscriminada, identificaciones y detenciones rozando el delito y provocando el terror. La connivencia de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado con la ultraderecha española no es de ahora, no hay más que visitar con cuidado y cariño las hemerotecas desde 1975, antes de esa fecha todo era la misma cosa.

Produce asco e indignación asistir en los últimos meses a un ataque a las plataformas ciudadanas contra los desahucios y el escrache como forma de protesta por parte de políticos y tertulianos a sueldo público más o menos directo, pagados con sobres u otras mamandurrias o adictos al régimen impuesto por el Partido en el Gobierno.  Se les ha acusado de nazis, pro etarras, etarras, kaleborroca, y se ha comparado a los diputados del PP con los judíos de la Alemania Nazi.  La misma Delegada del Gobierno en Madrid, la que autorizó la manifestación de apología del fascismo, fue la primera llamándolos pro etarras.  La última la del Ministro del Interior del Gobierno del Partido Popular, Jorge Fernández Díaz, el Jefe directo de “Nanzy”, en defensa del proyecto de Reforma de la Ley del Aborto del Misógino Ministro  Gallardón, nos dijo "que el aborto tiene algo que ver con ETA, pero no demasiado”. Las palabras se valoran solas.

La Asociación de Víctimas del Terrorismo, organización controlada por el Partido Popular, se escandalizó como no se había escandalizado con las anteriores acusaciones de pro etarras, filo etarras o directamente etarras, y está bien que se haga, pero ya es tarde para dar la cara. Mientras las víctimas del Holocausto ponían el grito en el cielo por la devaluación del término Nazi y de la persecución de los judíos y otras etnias durante el nazismo estos señores callaron con un silencio que lo dice todo.

Esto está tomando unos derroteros muy peligrosos, ya todos los que nos oponemos al Gobierno podemos ser considerados o somos considerados terroristas, etarras, nazis o estalinistas del Gulag. Desgraciadamente la deriva que está llevando la política en España tendrá un final muy feo, la situación social y económica más las provocaciones de estos descerebrados que nos gobiernan pueden convertir al Estado Español en una bomba de relojería, (¡joer!, ¿no me acusaran de terrorista?). Mientras, nuestro Presidente Plasma, que no plasta, aunque también, sentado en su sofá y desde las nubes contempla la situación satisfecho de haberse conocido ni se digna a bajar a la arena para condenar tanto desatino, claro que como es un plasma no puede, no conocemos quien maneja su mando a distancia ¿o sí?.